LUIS M. SÁNCHEZ.- Este año se prevé el desarrollo de por lo menos tres proyectos madereros en la entidad por parte de empresarios del norte del país y locales, informó Gustavo Winzig Negrín, director de la Comisión Estatal Forestal (COMESFOR).
Aclaró que están en proceso de “maduración” y previó que en un mes tendrán definidos los montos económicos a invertir y los empleos que serán generados.
“Estamos madurando todos esos datos, creo que en un mes más aproximadamente tendríamos datos más precisos de los empleos que se van a generar y de la inversión”, dijo.
Y en tres meses, abundó, comenzaría a construirse la infraestructura para instalar esas industrias.
Sin embargo, detalló, lo proyectos son: Una tableteadora en Huimanguillo, la siembra de 10 mil hectáreas de hule, que registra un avance de 50 por ciento, y una fábrica de muebles en la ranchería González, en el municipio de Centro, que es “casi una realidad” porque va a consumir tableros de madera MDF que está fabricando la compañía Proteak.
Especificó que la fábrica de muebles de oficina y escolares estará a cargo de inversionistas locales y la tableteadora es impulsada por empresarios del “norte del país”, pero no especificó de dónde.
Y es que, destacó, Tabasco representa un atractivo para los empresarios madereros porque en la entidad hay cultivos de plantaciones comerciales, no de bosques nativos que limitan su explotación.
“El problema en el norte es que la madera escasea porque es obtenida de bosques nativos que se pueden explotar limitadamente, y esa empresa no está teniendo el volumen adecuado para su capacidad instalada, y Tabasco es un atractivo porque aquí hay cultivos de plantaciones comerciales, no de bosques nativos”, insistió.
Además, subrayó, en Tabasco hay potencial para seguir sembrado árboles, lo que permitirá asegurar la materia prima.
Por otra parte, Winzig Negrín indicó que debido a la falta de recursos económicos federales, no se ha podido concretar la instalación de cuatro cámaras de vigilancia para combatir los incendios forestales y agropecuarios.
Detalló que hasta el año pasado la inversión necesaria era de 34 millones de pesos, pero por el alza del dólar debe ser actualizada esa cotización.
Expuso que las cuatro cámaras serían instaladas en lugares específicos donde se registran puntos de calor en el estado con mayor riesgo de incendios: Pantanos de Centla, Balancán, Centro y Huimanguillo.
Explicó que el objetivo principal es monitorear y tener un centro de monitoreo que les permita visualizar cuándo un punto de calor en cualquier parte del estado deriva en un incendio o en un conato y, así, poder acudir de la manera más rápida y darle atención para evitar su propagación.
Además, refirió, los dispositivos de vigilancia serían enlanzados con las bases de seguridad.
Externó que el proyecto ya fue replanteado ante la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la Cámara de Diputados federal, la cual en tres meses les darán una respuesta.
“Lo que pasa es que también tienen otras prioridades, porque reciben solicitudes de todos los estados y hay entidades que tienen problemas de incendios forestales,